El estudio Pulpografía es el encargado de darle vida a las cartas que conforman el mazo de Karuta. Aquí nos cuentan el proceso.
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Provistos por el material brindado por el Oriental que contiene información detallada sobre cada objeto y que se acompaña con fotografías, emprendimos la tarea de ilustrar las piezas de la colección presentes en el juego. Para ello, tomamos como punto de partida dos ejes fundamentales.
En primera instancia, la observación minuciosa de cada objeto, reconocer su materialidad y la forma en que se conectan los elementos que lo componen.
Una vez comprendido el objeto y entendiéndolo a este como una comunión de elementos que determinan la totalidad, nos basamos en el sistema de impresión que se utiliza tradicionalmente en las cartas de karuta.
Tratándose de un sistema de grabado a varias tintas, nos propusimos interpretar cada pieza traduciéndola a un código que cuenta con un máximo de cinco colores que pueden superponerse. En dicho código, la variable cromática es interpretada tanto por el tinte original de la pieza como por la diversa materialidad que en muchos casos la compone. La incorporación de esta última variable nos permitió traducir cada imagen a un sistema que emule la apariencia de los mazos originales y a su vez, otorgue coherencia al sistema de ilustraciones que compone el mazo.
De esta forma, si bien las ilustraciones están desarrolladas en un entorno digital, toman como referente un procedimiento que emula la producción artesanal que es propia tanto de las piezas como así también de los mazos de karuta.
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Carta 001 • Alejandro Somaschini
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Carta 002 • Mariana Sissia
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Carta 003 • Elvira Amor
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